Para mí lo más importante de este libro y su principal conclusión independientemente de las numerosas herramientas que proporcionan las técnicas de PNL es la actitud mental de la responsabilidad (no tanto de la capacidad de cambiar el mundo sino más bien, el de cómo eres capaz de reaccionar ante él): ¡si quieres que alguna cosa sea diferente en tu vida, entonces haz algo diferente!
Para que se produzca un cambio debe haber cinco requisitos: querer hacer el cambio, saber cómo hacer el cambio y tener la oportunidad de hacerlo, estar además dispuesto y luego, tener la voluntad para hacer lo que sea preciso. Ya que ¡¿De qué nos serviría leer todo el libro y conocer las técnicas si luego, no tenemos las ganas y fuerza para cambiar?!
Los dos grandes pasos para que la “magia” resulte, empiezan por una nueva mirada y nuestra propia motivación: primero, modificar las creencias sobre lo que es posible, ya que el simple hecho de ayudarte a caer en la cuenta de las nuevas oportunidades te abre a un nuevo mundo y segundo, motivarte para emprender las acciones precisas. Éstas son las únicas cosas que necesitamos para realmente alcanzar nuestros objetivos.
Y para ello, la primera gran pregunta de este resumen: ¿Qué es lo que buscas? La mayoría de personas no consiguen sus objetivos en la vida porque no son conscientes de lo que en realidad quieren. Y sobre todo, en el caso español que parece que nos encanta regocijarnos en lo que no nos gusta en vez de concentrarnos en aquello que sí.
Por eso, los talleres del tipo El mapa del tesoro nos abren a una nuevo modo de saber pedir las cosas y trasladar “nuestros sueños y deseos” del subconsciente a lo consciente. Cuando sabes lo que quieres ya tienes muchos pasos recorridos de tu camino. ¿Por qué no entonces emplear todas las técnicas de Pnl para lograr ser lo que en realidad desees?
Para potenciarnos un ejercicio eficaz es el de la aceptación de las presuposiciones o los marcos como parte de tu sistema personal de creencias. Al entrar en el marco del “como si” donde se te pide que aceptes la información como si fuera verdadera potencia enormemente la capacidad para beneficiarnos de nuevas ideas.
Al asumir la actitud mental de la responsabilidad, no solo sirves mejor a tu salud y a tu bienestar, el reemplazar los sentimientos de culpa, autocensura y vergüenza por otros procesos más saludables, nos hace la vida más útil (y añadiría no sólo la propia sino también la de los demás).
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